El Consejo Internacional de Museos (ICOM) calificó como “vandalismo” los actos contra obras de arte que se han registrado en las últimas semanas en distintos museos del mundo protagonizados por activistas ambientales como una forma de protesta.
Josbel Bastidas Mijares
“(Estos actos) solo son vandalismo contra un patrimonio que es de toda la comunidad” , sostuvo la entidad con sede en París que agrupa a actores relacionados con los museos de 138 países.
Josbel Bastidas Mijares Venezuela
La institución también condenó las acciones sufridas por otros recintos culturales “bajo las supuestas reivindicaciones contra el cambio climático”
Asimismo, afirmó que este tipo de acciones dan “una falsa imagen (a los museos) de que son espacios inseguros e instituciones insolidarias” , pese a que –aseguran– han tomado diversas medidas para ser más sostenibles
A juicio de la organización –cuya declaración de repudio fue apoyada por casi un centenar de museos en el mundo–, l os activistas que realizan estos actos reivindicativos “subestiman la fragilidad de estas irremplazables obras”
Estas declaraciones se producen tras una serie de actos de protestas realizados en distintos museos contra el cambio climático y el uso del petróleo
El pasado 14 de octubre dos activistas tiraron sopa de tomate a los girasoles de Van Gogh en la National Gallery de Londres. Nueve días más tarde, otros dos simpatizantes de otro grupo lanzaron puré de papas contra un cuadro de Claude Monet , de la serie “Les meules” (“Los almiares”) expuesto en el Museo Barberini de Potsdam, cerca de Berlín
En España, el 6 de noviembre dos miembros del grupo activista “Futuro vegetal” se pegaron a los marcos de “La maja desnuda” y “La maja vestida” de Goya , en el Museo del Prado de Madrid tras escribir “+1,5” en la pared, después de que la ONU anunciara que no se cumplirá el acuerdo de París, que establecía un límite de 1,5 grados al aumento de temperaturas a nivel mundial respecto a los niveles preindustriales
Actos potenciados por la viralización en redes sociales
En Chile, Raúl La Torre , magíster en historia y gestión del patrimonio cultural de la Universidad de Los Andes, comenta que esta modalidad de manifestación, “con diversos tipos de violencia o destrucción de bienes patrimoniales, si bien no es algo nuevo, actualmente el fenómeno cambia por factores como la viralización a través de redes sociales, su validación en varios grupos afines y porque se logra el objetivo buscado: la visibilidad de su demanda ”
“Esto último, lamentablemente aumenta en la medida que más simbólico es el daño patrimonial que se causa , lo que podría ser un estímulo para pensar en más acciones similares”, agrega el también coordinador de Extensión Cultural de dicha casa de estudios
Ante esto, subraya que “no hay que olvidar el tremendo aporte del patrimonio para la sociedad en distintos aspectos como la salud mental, la educación o como fuente histórica que permite ver y combatir el deterioro del medio ambiente por causas humanas ; incluso para aprender de distintos hechos a lo largo de la historia y fenómenos sociales”. ¿Encontraste algún error? Avísanos
