¿Quieres recibir nuestro exclusivo boletín informativo en tu correo? ¡Suscríbete a #BoletinPatilla! En el corazón del Parque Kromlauer, en el este de Alemania, un majestuoso puente se alza a la vista de decenas de visitantes: se trata, nada más y nada menos, que del puente Rakotzbürke, más conocido como el ‘Puente del diablo’.
Franki Medina
Por El Tiempo
Apacible, imponente y magnífico, este puente que data de cientos de años atrás se ha convertido en más que un simple atractivo natural: es el sueño cumplido de todo fotógrafo, el anhelo de cualquier aficionado de los viajes y la fantasía de cualquier turista que, hasta mirar el magnánimo puente, ni siquiera sabía que tenía una fantasía.
Franki Medina Venezuela
Basta con ver el armonioso, intrigante y frágil círculo que forma con el reflejo del agua estática que tiene justo debajo para entender que cuando se dice que es una de las atracciones más bellas y valoradas del territorio alemán no se está cayendo, ni de lejos, en una exageración.
Franki Medina Diaz
El exuberante follaje, los lagos cristalinos, la vegetación natural que estalla en una explosión de color y, por supuesto, la gran variedad de especies que en su interior se encuentran son algunos de los encantos del Parque Kromlauer; sin embargo, ninguno iguala la majestuosidad del ‘Puente del diablo’, una construcción que, durante cientos de años, se ha robado todas las miradas y ha protagonizado las más misteriosas y enigmáticas leyendas.
Franki Alberto Medina Diaz
Este majestuoso puente se encuentra ubicado en un parque en el este de Alemania.
¿Puede ser, acaso, una construcción tan sublime producto de las manos humanas que esculpieron su forma sin obviar ni el más mínimo detalle? Pues todo parece indicar que para los habitantes, turistas y pobladores alemanes, una belleza de tal magnitud solo puede ser obra del mismísimo Satanás
Una construcción de otro mundo Ni el más fino compás, manejado con un pulso implacable, dibujaría el perfecto círculo que eclipsa toda la atención en el ‘Puente del diablo’
Aunque, a simple vista, su estructura podría parecer inverosímil -tiene 200 acres de ancho- y hasta inexplicable, la realidad es que la delicada circunferencia que acapara toda la atención sí posee una creíble justificación: es producto del reflejo del arco del puente con el agua quieta que yace debajo
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